Consejos Seguros: ¿CUBREN LOS SEGUROS LOS DAÑOS QUE PUEDE CAUSAR UNA INUNDACIÓN?

Estos días un temporal de gota fría está azotando diversas provincias españolas. Las fuertes tormentas han causado riadas e inundaciones y también han provocado daños materiales por acumulación de agua. Numerosos coches han salido damnificados, aunque unos más que otros.
Seguramente, sus propietarios estarán muy pendientes de si su coche seguirá funcionando o si, por el contrario, será irrecuperable. Todo dependerá de la gravedad del siniestro, es decir, del nivel que haya alcanzado el agua y el tiempo que el vehículo haya estado en remojo. Si la altura de la inundación no ha superado la mitad de las ruedas podrán arrancar el motor, aunque quizás tengan que cambiar el catalizador.
En el caso de que la profundidad sea mayor y el agua entre por la entrada de aire del motor, el tema se complica. Lo mejor es no arrancar el coche y que una grúa lo lleve al mecánico para que lo revise. Según explica Eurotaller, se puede dañar el sistema de encendido o el propio propulsor. Asimismo, es conveniente comprobar el sistema eléctrico y realizar una limpieza exhaustiva de todos los componentes para eliminar el barro. Nos referimos tanto a los que están bajo el capó como a los que se encuentran en la parte inferior del coche, incluidos frenos y suspensiones.
Cuando el agua ha afectado también al interior, dependiendo del nivel alcanzado, habrá que cambiar la moqueta, la tapicería e incluso los asientos, los guarnecidos, los mandos de control, las fijaciones y los aislantes. Si los desperfectos son muy graves en todos los ámbitos, seguramente saldrá más a cuenta cambiar el vehículo que intentar repararlo. Su coste será superior al valor venal del ejemplar.
Y qué pasa con el seguro: ¿cubre los daños por desastres naturales extraordinarios? La respuesta es negativa. Ninguna póliza cubre sus consecuencias. En estos casos, las personas afectadas tienen que recurrir al Consorcio de Compensación de Seguros, una entidad pública española, adscrita al Ministerio de Economía y Empresa, que se encarga de reparar los daños causados y salvar los intereses de los afectados.
Cabe señalar que esta entidad solo responde si el usuario tiene previamente contratado un seguro. Así pues, si se inunda el garaje donde tenemos aparcado un vehículo sin seguro porque no lo utilizamos, el citado consorcio no cubrirá los desperfectos causados por el agua. Si bien los daños provocados en la zona de Levante por el temporal de gota fría sí que puede considerarse un desastre natural, hay otros fenómenos meteorológicos que no reciben tal calificación. Por ejemplo, una granizada. En este caso, los daños provocados en el coche como consecuencia del granizo solo quedan cubiertos por una póliza que incluya específicamente esta circunstancia. Generalmente, la modalidad de todo riesgo incluye indemnizaciones por los desperfectos causados por este tipo de fenómenos meteorológicos, como impacto o choque de objetos. Numerosos seguros a terceros cubren la rotura lunas, uno de los desperfectos que puede causar el granizo, en este caso es conveniente que si el coche tiene techo de cristal (panorámico) lo hagan saber al seguro para que lo incluyan en su póliza de seguros.